Facebook Link to Facebook Twitter Link to Twitter Instagram Link to Instagram Vimeo Link to Vimeo Youtube Link to Youtube Whatsapp Link to Whatsapp

El exilio de los hermanos Alfaro

Los Alfaro son tres hermanos que emigraron de El Salvador hacia los Estados Unidos huyendo de una amenaza de muerte. La historia de su viaje a través de México es la de muchos jóvenes centroamericanos que ya no migran para conseguir trabajo sino para salvar su vida.

Texto de Óscar Martínez.

por - Toni Arnau

—Huyo porque tengo miedo de que me maten –dice Auner cabizbajo.

Se unieron a la romería de los vomitados centroamericanos. Se metieron en este flujo de los que escapan. Unos de la pobreza, otros de la imposibilidad de superarse. Muchos, de la muerte.

 —Nos vamos al norte, hijo, verás cómo allá sí hay chamba, buen jale, buen dinero.

—Aquí vamos. Ya no nos queda de otra, vamos a subirnos al tren.

Huyen de una muerte sin rostro. Allá atrás, en su mundo, sólo queda un agujero repleto de miedo. Aquí, ahora, sólo queda huir. Esconderse y huir.

La carretera es una angostura de pavimento que sube, baja y se curva como un intestino indigestado. Bordea precipicios interminables. Corta cerros de piedra caliza.

Los vidrios se bajaron, los de adelante y los de atrás del lado derecho del coche. Salieron cuatro cañones de 9 milímetros. Empezó y terminó la masacre.

La madre, a sus 44 años, murió de un balazo en el centro de la frente o de un balazo en su sien izquierda. Quien sabe cuál entró primero. Fueron dos muchachos. Uno manejaba la bicicleta, el otro iba parado en los tornillos de las ruedas.

—¡Puta madre! –exclamó– la violaron entre ocho.

—¿Volverías? –pregunto.
—No, nunca –sigue con los ojos clavados en la tierra.
—¿Renunciás a tu país?
—Sí.
—¿No volverías nunca?
—No… Bueno… Solo si tocan a mi mujer o mi hija.
—Y entonces, ¿a qué volverías?
—A matarlos.
—¿A quiénes?
—No sé.